En el bullicioso corazón de Nueva York, donde las calles zumban con una energía vibrante y culturalmente diversa, encontramos a Gary Merson, un periodista dominicano que ha conquistado las ondas de Univisión 41 por su determinación de ejercer su pasión por el periodismo donde sea que se encuentre, guiado siempre por su curiosidad y hambre de aprender.

Desde su primera incursión en el mundo de la televisión en la República Dominicana hasta su consagración como una figura destacada en Univisión 41 en Nueva York, Gary Merson ha demostrado una dedicación inquebrantable a su profesión y una determinación sin igual para alcanzar sus metas.

Con una formación académica sólida en Publicidad, Comunicación y una especialización en Periodismo Económico, Gary forjó su camino en el periodismo desde una perspectiva técnica en CDN, luego pasó por Telesistema y, finalmente, se convirtió en un rostro familiar en Noticias SIN, donde no solo informó a la audiencia, sino que también participó en importantes coberturas y producciones.

Su éxito no pasó desapercibido y recibió reconocimientos, tanto a nivel nacional como internacional, incluyendo el prestigioso Premio Epifanio Lantigua de la Asociación Dominicana de Prensa y Turismo (Adompretur) y dos premios Emmy, en Nueva York, así como múltiples nominaciones a estos galardones, el pináculo del reconocimiento en la televisión estadounidense.

Desde 2017, Gary ha sido una parte integral de Noticias Univisión 41 en Nueva York, llevando su pasión por el periodismo y su compromiso con el servicio social a una nueva audiencia. Pero, detrás de su impresionante carrera profesional hay un viaje de desafíos y triunfos personales.

Quemar las naves en RD
Cuando le preguntamos sobre los desafíos que enfrentó al migrar a Estados Unidos, Gary comparte la importancia de la osadía y la preparación. Para él, migrar no solo representaba una búsqueda de oportunidades laborales, sino también un compromiso con la excelencia profesional, con el deseo de explorar otras latitudes y estar cerca de los que ama.

Para nadie es fácil quemar las naves en su país de origen y volver a empezar de cero en otro, Gary valora la suerte que tuvo por la acogida de familiares que ya habían allanado el camino antes que él, que le esperaban con los brazos abiertos, como su padre y hermanos, “ellos se convirtieron en un círculo importante, de esos que no te dejan perder en un mapa, no te dejan deprimir y obtienes la orientación necesaria”.

Confiesa que, aunque logró colocarse en una cadena hispana y había estudiado inglés desde adolescente, “cuando llegas te encuentras una diversidad de acentos y ritmos al hablar que te desorientan un poco”, es ahí donde entra el juego lo dispuesto que se está a trabajar por las metas y sueños, agregando que “puse de mi parte y logré acomodarme al ritmo”. ‘Intentarlo hasta dominarlo’ fue un mantra que lo acompañó y sigue acompañando ante los retos y desafíos.

¿Por qué Univisión? A esta pregunta nos dice: “Antes de hacer contacto con Univisión, ya había tenido conversaciones con otras cadenas; sin embargo, esta era la que deseaba en lo más profundo de mi ser, por el prestigio, imagen y porque, desde niño, sus programas habían calado en mi memoria a través de las transmisiones internacionales que llegaban a la República Dominicana”.

El egresado de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), con estudios en España, Israel y Estados Unidos, afirma que, aunque no fue fácil adaptarse a un nuevo entorno y encontrar su lugar en la industria de los medios de comunicación en Estados Unidos, “no es imposible, en especial porque ya los migrantes de habla hispana tenemos más relevancia y oportunidades porque otros, como nosotros, no se dieron por vencidos, somos una comunidad que crece y se supera en base al trabajo”.

Terruño y valores
Su identidad dominicana ha sido una parte integral de su carrera, brindándole una conexión única con la comunidad hispana en Nueva York. Aunque la base del periodismo es la misma en todas partes, Gary reconoce la importancia de comprender las necesidades e intereses de su audiencia y su identidad dominicana le ha ayudado a establecer esa conexión de manera efectiva.

A lo largo de su trayectoria, Gary ha mantenido firmes los valores que aprendió en su país de origen: responsabilidad, estabilidad, disciplina y un constante deseo de superación. Estos valores han sido su guía, tanto en su vida personal como en su carrera profesional, y continúan inspirando a otros migrantes que están pasando por experiencias similares.

Le preguntamos si ha encontrado formas de mantener viva su conexión con su tierra natal.  Responde categórico con un “¡claro que sí! Con añoranza confiesa: “Uno nunca se desconecta por completo y esa es la ventaja de las redes, uno vive al tanto de lo que pasa, como decimos aquí, en ‘nuestro segundo patio’, ya sea a través de los medios, de publicaciones o de los amigos. Además, he tenido la oportunidad de interactuar en los noticieros de mi antigua y eterna casa, Noticias SIN, directamente con Alicia Ortega; dejando que la gente sepa de mis pasos”.

Tanto en República Dominicana como en Estados Unidos, nos cuenta Merson, el dominicano es muy colaborador, “siempre te quiere contar una historia, sea personal o de su entorno, por lo que nos facilita el trabajo o en su defecto, nos hace el ambiente”, en pocas palabras, sin importar que esté a 2,470 kilómetros de su tierra natal, él sabe que en cada uno de ellos está su patria.

Cómo se ve y cómo lo ven
Cuando las personas sintonizan Univisión 41, pueden ver un Gary Merson laureado y lleno de éxitos, sin embargo, él se define como un hombre sencillo que ha transitado un camino lleno desafíos con fe y perseverancia que le falta mucho por aprender, conocer y hacer. Está consciente que “podemos alcanzar las estrellas, sin importar de dónde vengamos, pero se logra con trabajo”.

Se declara un eterno aprendiz y su hambre no se detiene. Aprovecha cada oportunidad para aprender y se interesa por participar en conferencias y conversatorios acerca de cómo desenvolverse en el periodismo local, donde otros profesionales consagrados comparten sus experiencias en Estados Unidos. También lo ve como una manera de estar en contacto con sus paisanos.

Como anécdota, nos cuenta que le ha ocurrido varias veces que se inscribe y, cuando se va acercando la fecha, “recibo una llamada diciendo que saben que asistiré y en vez de espectador, ¡me quieren como orador o disertante! Ya sabrán ustedes que es un honor y es reflejo de que uno no siempre está en completo conocimiento de la incidencia que tiene a nivel profesional, hasta que se dan esas oportunidades”.

¡No te limites!
Como consejo final para aquellos que están considerando migrar en busca de oportunidades, Gary enfatiza la importancia de la determinación y la búsqueda activa de sus sueños. «Esperando oportunidades se te puede pasar la vida. Si no sales a buscar tu espacio, este no siempre llegará a tu puerta», dice él, instando a otros a perseguir sus sueños con pasión y determinación.

La historia de Gary Merson es un testimonio inspirador de cómo la determinación, la preparación y la dedicación pueden llevar a grandes logros, incluso en tierras extranjeras. Su carrera en el periodismo es un recordatorio poderoso de que el trabajo arduo y la perseverancia pueden abrir puertas a un futuro lleno de éxito y realización personal.

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