¿Recuerdas aquellos tiempos cuando se tenía que salir del hogar para realizar compras? Había que separar gran parte del día para realizar gestiones básicas como ir al colmado, a la farmacia, a la ferretería, a un centro comercial o a un restaurante. La internet y el “e-commerce” cambió todo esto, haciendo posible que los consumidores tuvieran variedad a su alcance con tan solo tocar un botón. A su vez, la tecnología hizo que los comercios aumentaran su base de clientes más allá de su vecindario inmediato.
Hoy, de cara a las circunstancias actuales, vivimos la transformación del mercado a plenitud. A través de la innovación, los consumidores ya no tienen que llegar hasta donde están las marcas para beneficiarse de sus bienes. Todo lo contrario. Las marcas ahora llegan hasta donde estén los consumidores, aportando a su estilo de vida y facilitando su diario vivir con servicios arraigados en la conveniencia.
Más allá de ofrecer productos o servicios puntuales, las marcas están aprovechando la tecnología para fortalecer su propuesta de valor. Esa es la moneda que más valor ha cobrado entre los consumidores, la comodidad de poder realizar gestiones sencillas pero esenciales sin interrumpir su tren de vida.
Nueva generación de consumidores
Con innovación en mano, las marcas están conectando con una nueva generación de consumidores de manera más eficaz, atendiendo sus realidades con una gama de alternativas que va desde “delivery” de restaurantes hasta compras y entregas de una variedad de comercios como colmados, farmacias, ferreterías, jugueterías, artículos de oficina y más.
Cada vez más marcas reconocen que esta tendencia es el presente y futuro del mercado. Como empresa de tecnología, la plataforma de Uber continuamente ajusta su innovación para optimizar las experiencias tanto de los consumidores como las marcas, todo centrado en brindar mayor conveniencia, además de aumentar su rol en el diario vivir de las personas, aportar a la reactivación económica, e integrarse en el tejido social de las comunidades.
Por ejemplo, más de dos millones de usuarios en la región de Centroamérica y el Caribe utilizan la app para movilizarse con Uber, enviar artículos con Uber Flash, y ordenar de sus restaurantes favoritos y comercios con Uber Eats. En línea, con el aumento global en actividades de “e-commerce”, claramente las personas ven la app como una herramienta para cumplir con sus tareas cotidianas, lo que motiva el desarrollo de innovaciones para brindar aún más rentabilidad y conveniencia, como Uber Pass, el programa de membresía, y la integración de todas las modalidades de Uber en una misma plataforma.
Evolución de las marcas
La evolución de las marcas hacia entidades que enriquecen el estilo de vida de las personas no solo redunda en beneficios para los comercios y las personas; también aporta a la reactivación económica de las comunidades. Al robustecer su alcance con la tecnología, las actividades de las marcas a través de plataformas como Uber también generan oportunidades para que los socios repartidores y socios conductores generen ingresos adicionales. Esto cobra gran valor en estos tiempos de incertidumbre.
Igualmente, la innovación abre la puerta para que las marcas, como Uber, logren un mayor impacto como ciudadano corporativo responsable. La urgencia de la pandemia dio paso a iniciativas como Uber Medics, una opción desarrollada exclusivamente para profesionales de la salud y personal en el frente de batalla contra el virus. La app otorgó más de 7 mil viajes hacia y desde instituciones hospitalarias. Uber también lanzó un programa para movilizar a las personas a y desde los centros de vacunación, para acelerar el proceso de inoculación masiva y contribuir así con la reactivación de la ciudad.
La realidad es que las marcas ya no son un destino, sino un “partner” que forma parte del día a día de las personas. Por lo tanto, las marcas tienen la responsabilidad de no solo vender, sino de aportar valor a sus productos o servicios con experiencias que cumplan con lo que los consumidores más necesitan ahora, conveniencia.